Según USA Today, el Pentágono dispone de un
grupo de trabajo que se dedica a estudiar el lenguaje corporal de los
principales dirigentes mundiales [1].
Según el vocero del Pentágono esa unidad trabajó sobre
la personalidad del presidente ruso Vladimir Putin en 2008 y en 2012,
pero no lo habría hecho desde entonces. El secretario de Defensa,
Chuck Hagel, no parece haber tenido conocimiento de los informes
al respecto [2].En el programa Body Leads trabajan los profesores Brenda Connors (investigadora en la Escuela de Guerra de la US Navy), Richard Rende (siquiatra en la universidad Brown) y Timothy Colton (rusólogo en Harvard). La Dra. Connors trabaja para la ONA (Office of Net Assessment), una estructura creada dentro del Pentágono por los discípulos del filósofo imperialista Leo Strauss y dirigida por el influyente Andrew Marshall (ver imagen).
El Movimiento de Análisis de Comportamientos que menciona la Dra. Brenda Connors fue creado en 1940 por el húngaro Rudolf Laban y desarrollado posteriormente por el británico Warren Lamb, recientemente fallecido.
Según el obituario publicado en The Independent [4], el trabajo de Warren Lamb fue tardíamente reconocido por varias transnacionales y por el gobierno de Estados Unidos. Supuestamente se le pagó 24 000 dólares como consultante del programa Body Leads y al parecer trabajó personalmente en el estudio de la personalidad de Vladimir Putin.
La Dra. Brenda Connors se refirió a sus estudios sobre Vladimir Putin, pero lo hizo en 2005 [5], o sea mucho antes de haber trabajado oficialmente sobre el tema. Estima que el lado izquierdo de su cuerpo es muy natural mientras que el lado derecho parece parcialmente paralizado y su mano derecha parece insensible. La Dra. desarrolla varias hipótesis sobre lo que ella interpreta como una limitación pero observa que, a pesar de eso, el presidente ruso llegó a ser campeón de artes marciales. Basándose en lo anterior, la Dra. compara sus movimientos con los de un reptil y hasta estima que se comporta como tal cuando se invade su territorio.
Fuente: Red Voltaire.