Por Diana Rojas
Fuentes libanesas han manifestado a la agencia italiana AKI que China
podría seguir la línea de Rusia y enviar militares y armas a Siria con
el fin de luchar contra el terrorismo en ese país.
Otro artículo
aparecido en The Times of Israel de la analista Cristina Lin señala
también que China podría verse obligada a dar este paso debido a la
existencia de unos 3.500 terroristas chinos de la etnia uigur (residente
en la región china de Xinjiang) en la localidad siria de Yish al
Shugur, que fue tomada hace meses por el Frente al Nusra y se ha
convertido en un feudo del grupo takfiri Partido Islámico del
Turquestán, que está integrado, junto al anterior, en el “Ejército de la
Conquista”, respaldado por Turquía.
El portavoz del TIP en la mencionada ciudad, Abu Ridha al Turkistani, ha
difundido vídeos de su grupo en los que invita a otros uigures a viajar
a Siria con el fin de trasladar más tarde esta lucha a Xinjiang. En uno
de ellos, él aparece subiendo a una torre y colocando en ella una
bandera del Frente al Nusra que lleva también el nombre de su
organización. Los uigures han recibido armas sofisticadas que el EI ha
obtenido en Iraq y muchos de ellos han decidido unirse a este grupo. Si
los terroristas uigures expanden su número y actividades dentro de las
filas de los grupos terroristas, como el EI y el Frente al Nusra,
Xinjiang podría convertirse en el próximo Afganistán.
Recientemente,
en Bangkok, terroristas vinculados a los militantes uigures llevaron a
cabo un ataque contra un hotel lleno de residentes chinos.
En
2013, China, en base a esta situación, aprobó una resolución para
“llevar la lucha contra los terroristas uigures a otros países antes de
que la amenaza crezca”, lo cual significaría desplegar tropas en Siria.
No sería difícil para China emprender una acción de este tipo cuando sus
intereses de seguridad nacional están amenazados. Esto no supondría
tampoco una violación del principio de no injerencia, que China
defiende, porque éste afecta al respeto a los gobiernos y a no tratar de
derrocarlos, pero no tiene relación con una ayuda pactada con el país
en cuestión. Si el gobierno sirio pide ayuda a Rusia, China u otros
países, esto estaría conforme con la ley internacional.
La guerra turca contra China a través de terceros
La
situación para China es aún más grave por el apoyo turco a los
terroristas uigures que no sólo mantienen un vínculo ideológico con el
gobierno de Recep Tayyip Erdogan, sino que sirven también a sus sueños
expansionistas, que buscan recrear el Imperio Otomano.
En enero, Erdogan mostró en su palacio a 16 soldados vestidos con
uniformes históricos, que incluían a un uigur. El presidente turco no
oculta, en ese sentido, su ambición de crear un “mundo turco desde el
Mar Adriático hasta la Gran Muralla” de China.
Según medios turcos, el guerrero uigur representaba “una parte de los imperios turcos”, uno de los cuales era el Janato Uigur.
El
servicio de inteligencia turco (MIT) ha sido acusado recientemente de
proporcionar armas y pasaportes falsos a los chinos uigures para que
vayan a luchar en Siria al lado de los grupos terroristas.
Motivos estratégicos
China,
por otro lado, desea la estabilidad en Oriente Medio y ve los intentos
de EEUU y sus aliados para dominar esta zona como perjudiciales para
Rusia, China y otros países. Esto fue una de las causas por las que
China ayudó a Irán bloqueando varias resoluciones presentadas por EEUU y
otros socios occidentales para ampliar las sanciones contra este país y
oponiéndose decididamente a un ataque militar norteamericano contra el
mismo.
China considera asimismo que una caída en Siria en manos
de grupos controlados por EEUU o sus aliados afectaría negativamente a
su seguridad nacional. Siria ha mantenido, de hecho, extensas relaciones
históricas con China y la economía siria está muy vinculada a la del
gigante asiático.
Por todo ello, China puede tomar en cualquier
momento la decisión de enviar una ayuda militar a Siria o incluso tropas
a este país con el fin de derrotar la ofensiva terrorista en él,
prevenir una grave amenaza a su seguridad nacional e impedir que sus
rivales geopolíticos intenten obtener ventajas de esta situación.
Fuente: Al Manar