Una
investigación de 15 meses por The Guardian y la BBC en árabe revela
cómo el coronel retirado de EE.UU. James Steele, un veterano de las
guerras por poderes norteamericanos en El Salvador y Nicaragua, jugó un
papel clave en la formación y supervisión financiados por Estados Unidos
comandos especiales de la policía que dirigía una red de centros de
tortura en Irak.
Otro veterano de las fuerzas especiales, el coronel James Coffman,
trabajó con Steele y reportaba directamente al general David Petraeus,
quien había sido enviado a Irak para organizar los servicios de
seguridad iraquíes. . . .
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Fuente: The Guardian