Este estará ubicado a treinta kilómetros de La Habana, en lugar del aeropuerto militar de San Antonio de los Baños. Este proyecto permitirá simplificar el sistema logístico existente. En particular, tras llegar a La Habana, los turistas podrán tomar un vuelo directo a Venezuela, Nicaragua y otros países. Según lo planificado, la creación de este nuevo nodo permitirá incrementar considerablemente los flujos de viajeros procedentes de Rusia.
La creación de este nodo
de transporte aéreo y una compañía conjunta cubano-rusa está incluida en
el programa de colaboración entre estos dos países hasta 2020. La
realización de este proyecto permitirá simplificar el transporte de
turistas rusos hasta Cuba y otros países de América Latina. Dmitri
Abzálov, presidente del Centro de Comunicaciones Estratégicas, nos
relata:
—Se trata de un destino con muchas
perspectivas. Rusia podrá utilizar este aeropuerto como base, para
incrementar su presencia en estas regiones. Nos referimos, por ejemplo, a
las Antillas Menores, que en los últimos tiempos se han convertido en
uno de los destinos preferidos de los operadores turísticos rusos.
Hablamos de República Dominicana, país con el cual tenemos un sistema de
exención de visados. Hablamos también de los cayos aledaños a Cuba.
Venezuela y Brasil también se tornan destinos muy populares. Todo este
segmento podemos cubrirlos gracias a la creación de este nuevo nodo.
La
existencia de tres pistas de aterrizaje del antiguo aeropuerto militar
permitirá una gran economía durante la realización de este proyecto.
Está previsto que las inversiones en la creación de la nueva terminal se
amortizarán rápidamente gracias al incremento del flujo de turistas.
Los vuelos trasatlánticos son muy ventajosos para las compañías aéreas,
semana el experto de RBC daily, Serguéi Stárikov:
—No
es un secreto que los puntos de transbordo de cargamentos aéreos más
atractivos se encuentran en América. Se trata de Nueva York y Miami,
ubicado a cien kilómetros de La Habana. Pero para hacer un trasbordo
allí es necesario tener visa. Pero el nodo habanero puede convertirse en
una especie de alternativa para un tránsito sin visa tanto para los
pasajeros procedentes de Europa, como para los de China y Asia.
Para
Cuba, este es un proyecto muy ventajoso desde el punto de vista
económico, ya que disfrutará de importantes inversiones directas,
subraya el vicepresidente del Centro de Comunicaciones Estratégicas,
Dmitri Absálov:
—Hablamos de nuevos puestos de
trabajo, que elevarán el nivel de modernización de la infraestructura
aeronáutica. Se trata de una instalación en la esfera de los servicios,
tradicional en el país, porque el incremento del flujo turístico
despertará un crecimiento del interés en el propio país. Se trata de
inversiones adicionales en el sector del turismo. O sea, una buena base
para el desarrollo económico del país.
Los
transportistas aéreos cubanos se preparan para recibir un incremento de
turistas procedentes de Rusia. La compañía nacional Cubana de Aviación
está dispuesta a comprar tres naves An-158 y tres Il-96 de largo vuelo.
El contrato de entrega de equipamiento aéreo ruso a Cuba está valorado
en seiscientos cincuenta millones de dólares. La Habana, por cierto, ya
explota con éxito siete naves rusas, de las series Il-96 y Tu-204.
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