Conseguir llevar la boina roja de las Spetsnaz es un reto para
todos los candidatos, una prueba de voluntad, fuerza, coraje y valentía.
La consiguen solo los más fuertes, un tercio de los que se presentan a
las pruebas. Si la consiguen, la besan, se levantan y se la ponen,
gritando las palabras sagradas: “¡Sirvo a la Federación de Rusia y a las
Fuerzas Especiales!” Vea más en nuestro documental: ‘El combate por la
boina roja’.
Fuente: R.T.